miércoles, 15 de octubre de 2014

Reflexiones acerca de los grandes valores de la literatura colombiana del siglo XIX (II)

GUADAÑAZOS PARA LA                           
BeLLA ViLLA            
                " La literatura a tajo abierto"     

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Edición No. 158, octubre de 2014
Directores: 
Raúl Jaime Gaviria
Hernán Botero Restrepo 
Publicación de Revista Asfódelo





Reflexiones acerca de los grandes valores de la literatura colombiana del siglo XIX (II)

Por Hernán Botero Restrepo

Prosiguiendo con la narrativa decimonónica colombiana, tan olvidada como digna de conocerse, en algunos de sus ejemplos, que no son pocos, hay que tener en cuenta la obra de los esposos Samper, que escribieron cada uno por su cuenta obras de excelente  factura estética para su época como lo son: Estella y los mirajes e Historia de un alma de don José María, obra de carácter autobiográfico, con algunas afinidades con el Chateubriand de Memorias de ultratumba . Otra obra a destacarse, en el terreno de la crónica histórica, es: Los piratas en Cartagena, la más conocida de las obras de doña Soledad, aunque no necesariamente la más lograda, que tal vez sea la novela: Un chistoso de aldea ambientada en los tiempos de la independencia, plena del más chispeante humor y rescatada del olvido en una edición reciente. Una obra poco conocida, pero excelente dentro de su género, es la de Felipe Pérez, que se dedicó a novelar el mundo de los incas en tiempos de la conquista con un cierto garbo y poder sugestivo. Las más importantes de entre sus obras son: Atahualpa, Tupac Amaru y Los Pizarros, en ellas se percibe un cierto aroma dumasiano, lo que las hace aún más peculiares.

En lo que atañe a don José María es de resaltar la novela Florencio Conde, la primera novela en que se aborda el tema del mestizaje en Colombia y Martín Flórez, también novela, enmarcada en el cuadro de la Colombia de las primeras guerras civiles luego de la liberación de España.

Entre los autores del mosaico (Museo de costumbres y variedades de Vergara y Vergara y sus amigos) es preciso señalar los aciertos de José Caicedo Rojas, por el humorismo de su libro: Mis paseos al Salto y la novela histórica Don Álvaro. Insistiendo en el humor, hay que celebrar el texto: Un sábado en mi parroquia, y otros cuadros de Fermín de Pimentel y Vargas.

Volviendo a la novela no hay que pasar por alto la obra: El doctor Temis de José María Ángel Gaitán, inspirada en el famoso abogado-bandido Russi, del que en rigor no se conoce con exactitud su trayectoria delictiva, personaje que en nuestros tiempos inspiró la novela Los ojos del Basilisco de Germán Espinosa. No ha de olvidarse tampoco que la obra: Reminiscencias de Santa fe y Bogotá de José María Cordovez Moure también se ocupa del abogado de marras con no poca gracia lo que acerca al autor a Las tradiciones peruanas de Ricardo Palma.

Para finalizar, sin pretensiones de agotar el tema, hay que hablar así sea de algunos de los mejores costumbristas y cuentistas de la región paisa como lo son: don Pedro Restrepo Uribe, Ricardo Restrepo, Manuel Uribe Ángel, Saturnino Restrepo, Eliseo Arbeláez y Camilo Botero Guerra.

Bibliografía de textos breves:

El relato temprano antioqueño; compilador Jorge Alberto Naranjo; El mosaico, variedades y viajes; compilación de José María Vergara y Vergara; Un montañés de Eliseo Arbelaez (primer cuento de mérito escrito en Antioquia); Camilo Botero Guerra (Don Juan del Martillo); Casos y cosas de Medellín.